Fui invocada a otro mundo, pero en el cuerpo de un chico.

Vidas desafortunadas, y sonrisas que logramos proteger

[ Lunes 27 de Julio del 2020 --- 07 : 35 pm ]

---Muchas gracias por la cena, amor.

Astaroth, después de terminar de comer agradeció con una sonrisa a su esposa, quien lo miró a la cara con una sonrisa algo gélida.

---Hohoho~ Si dijeras eso mientras te arrodillas~ También puedes suplicar perdón por irte muchos años~

--- ¿No me habías perdonado ya?

---Claro cielo, ya perdone que te hayas ido por varios años. Ah, cierto, cierto, no habías desaparecido, tan solo no dejabas que te viera. Claro, claro, yo sufriendo por tu partida y la condición de nuestro hijo y tú observándome desde las gradas... hohoho~

La sonrisa de ambos parecía oscurecerse cada vez más.

---Ya te había dicho que esa no era mi intención.

---He escuchado eso tantas veces, "No era mi intención esto. No era mi intención lo otro"

Leo al ver que ambos empezarían a discutir por cosas del pasado, suspiro internamente.

[¿Por qué siempre tienen que discutir un día antes de mi cumpleaños? Ha sido así desde que padre volvió] Pensó Leo mientras terminaba de cenar.

Ciertamente era como Leo lo comentó dentro de su nube de pensamiento, desde que Astaroth regresó a ser parte de la familia, siempre, un día antes de su cumpleaños, ambos empezaban a discutir, queda obvio decir que la madre siempre era la que empezaba con todo, como si en una parte de ella aun quedara un resentimiento por esos casi diez años de abandono, y eso que ya sabía que su esposo jamás los abandonó, simplemente se mantuvo realizando su trabajo mientras los cuidaba oculto bajo las sombras.

--- ¿¡Qué más quieres que te diga!?

--- ¡No hay nada que puedas decirme! ¿¡No dices que ya me has dicho todo los secretos del mundo!? ¡Si claro! ¡Ey~ Mírenme soy prácticamente una de las pocos humanos que sabe la existencia de Dios y el diablo!

Angelina vio como una vena resaltó en la sien izquierda de su esposo.

--- ¡Oh perdón, quiero decir, mi adorado suegro y querido cuñado! ¿¡Que!? ¡No me mires de esa forma!

Astaroth trató de dirigir su mirada a otro lado.

--- ¡Tampoco me ignores, mírame a los ojos, cobarde!

--- ¿¡Por qué siempre te comportas como una desquiciada incomprendida en estos días!?

Al escuchar la pregunta, dos venas resaltaron en la sien de Angelina, fue en ese momento en que Leo escapo por su vida sin que ambos se dieran cuenta, y Astaroth comprendió que había comprendido que en esta ocasión echó mucha leña al fuego.

--- ¿¡Crees que soy incomprendida y una desquiciada!? ¿¡Eso es lo que tratas de decirme!? ¿Qué soy una loca!? ¿¡Sabes quienes en verdad son unos locos desquiciados e incomprendidos!?

Angelina levanto su puño al cielo.

--- ¡No me importa si me cae un rayo del cielo!

Y luego bajo su puño, señalando al piso.

--- ¡Tampoco me importa que la tierra se abre y me trague!

La mesa y los platos sobre esta se habían roto en alguna parte de la discusión, el comedor se convirtió en un desastre.

Entre todo este caos, en donde los vecinos solo pudieron quedarse callados y no decir nada o toda la ira de una sola mujer caería sobre ellos, hasta la dueña de los departamentos decidió que sería mejor idea salir a caminar por ahí; tan solo dos personas se encontraban de pie, uno no soportaba el peso de las palabras que su esposa decía, no pudo contradecir nada puesto que sería peor, y la otra, se dejó llevar por la ira, una ira que al principio le pareció gracioso a Lucypher del crepúsculo, que había estado monitoreando la discusión de esos dos desde su despacho en el sótano de su discoteca; aunque luego sintió algo de pena por su hermano y tal vez algo de miedo por esa humana, razón por la que decidió apagar su laptop.

--- ¡En este mundo los más locos, desquiciados e incomprendidos, son esos dos, ese suegro que nadie sabe lo que está pensando y ese cuñado infantil que solo quiere la atención de su padre, ambos solo deberían llevarse bien! ¡Desgraciados! ¡Si algún día llego a verlo los golpearé en nombre toda la humanidad! ¿¡Quien crees que somos!? ¡No somos sus juguetitos pedazos de—

Y así fue casi toda la noche...

***

[ Martes 28 de julio del 2020 --- 04 : 02 am ]

--- ¿Madre ya se fue a dormir?

---Eso parece...

Eran casi las cuatro de la mañana y como ya no pudieron escucharse más ruido, Leo salió de su cuarto con dirección al comedor, fue ahí donde encontró a su padre ordenando el desorden que se originó en la discusión.

---Se armó una muy fea.

---*Suspiro* Tú madre se comporta como la esposa y madre ideal siempre, que un día se desequilibre y desate su ira, no le hará daño al mundo... Creo.

---Ese "Creo" me da muy mala espina.

---Mi hermano debe estar algo preocupado por la situación.

--- ¿El tío? ¿Por...?

---Dijo que iba a escuchar nuestra conversación para escoger un regalo para la familia.

Los hombros de Astaroth se cayeron.

---Al principio parecía estar alegre, pero luego empecé a sentir algo de 'miedo' que desprendía de su interior.

---'Miedo' ¿Por madre?... jajaja.

Ese "Jajaja" en realidad no era una risa para burlarse, sino más bien de preocupación, que el mismo ser que es catalogado como Dios del infierno, la maldad pura de este mundo; sintiera un poco de miedo por su madre, era en verdad para preocuparse.

---Hace un rato me comentó que 'no se acercaría aquí ni loco'.

---Bueno, en parte es algo bueno.

--- ¿?

---Tener al mismo diablo en casa y comiendo sobre la misma mesa, sería algo perturbador.

Ambos sonrieron algo incomodos.

El silencio entre ambos perduro por varios minutos.

---Cierto, hijo, sabes, ya que he visto como has madurado en todo este tiempo, quiero tener una conversación seria contigo.

Astaroth Incitó a su hijo de 17 años a tomar asiento.

--- ¿Pensé que las sillas y la mesa se habían hecho añicos? Ah, es verdad. No hay nada que no pueda repararse con poderes.

---No lo digas de esa manera, mira que trato de ignorar el hecho que usé poderes demoniacos solo para reparar una mesa, sillas, un par de vasos y platos, es triste que saber que una vez utilicé esos poderes para combatir contra el ejército de padre.

Leo vio que la poca fuerza que le quedaba a su padre se desvanecía.

---Okey, lo lamento.

Luego de una breve pausa.

---Entonces, padre. ¿De qué querías hablar?

Al escuchar la pregunta de su hijo, Astaroth se recompuso.

Su mirada era seria.

---Normalmente esto entre los demonios es tabú pero como yo soy el que te ha estado supervisando, voy hacer el de la vista gorda.

Con duda, Leo preguntó.

--- ¿Ha que refieres? Padre.

---Antes de empezar quisiera desearte un feliz cumpleaños.

Un poco distraído, Leo observó el reloj de pared.

Cuando confirmo la hora y fecha, miró la pulsera en su muñeca izquierda.

---... Así que ya tengo 17.

---Feliz cumpleaños hijo, este regalo es de parte mía y de tu mamá.

Astaroth le alcanzó a Leo una caja de 30x30 cm.

--- ¿Puedo abrirlo...?

---Adelante.

Leo retiró el papel de regalo color rojo.

--- ¿Esto es...?

Cuando vio el objeto que se encontraba dentro de la caja, sus ojos se abrieron ampliamente.

El objeto era algo parecido a un IPod, pero había algo diferente.

---Es un objeto que yo conseguí en el mercado negro, aunque tu madre ayudo a pagar con la mitad, así que no puedo decir que es completamente que es mi regalo sino de ambos.

---Si padre, ya lo entendí, no te compliques.

---... Bueno, tal vez pienses que es un IPod normal, pues déjame decirte que es lo último en tecnología, no sé cómo los humanos se las arreglan para construir estas novedades. Eso sí, nadie puede verlo, ya que ni siquiera ha salido a la venta en los mercados podría ser sospechoso.

---Y yo que pensaba que escuchar "Mercado negro" no era suficiente.

---Antes que te desanimes escucha esto hijo.

Astaroth apuntó con su mano derecha hacia el IPod.

---Este dispositivo te permitirá volar por los cielos sin ser detectado por los radares de la fuerza aérea, es como un camuflaje no sé qué... la cosa es que te vuelves como que invisible para los humanos.

---Padre, ya entendí, relájate, te está saliendo mucho humo de la cabeza.

Leo esperó que su padre se tranquilizara para recién empezar a hablar.

---Así que básicamente, esto me permitirá volar por los cielos sin ser visto por los humanos.

[Lo había visto en películas de ciencia ficción... tal vez si mi padre no fuera un autoproclamado ángel caído, no me creería que esto si quiera funcione, pero...] Pensó Leo antes de continuar.

---Es como si fuera mi último y mejor regalo del mundo.

Casi se le escapan un par de lágrimas, pero lo soportó.

---...Ahora si puedo continuar con la conversación anterior.

Leo asintió para que su padre prosiguiera.

---Hijo, vas a morir, eso es un hecho indiscutible.

---...

---Posiblemente sea una muerte lenta y dolorosa, hasta tal vez pierdas la cordura por un tiempo.

Astaroth endureció sus emociones e ignoró la expresión de su hijo.

---Te lo puedo asegurar ya que he visto morir muchos de mis hijos que han estado en tu mismo estado.

Cerró sus ojos mientras recordaba aquellos días.

---Algunos enloquecieron a tal punto que crearon enfermedades para extinguir a la humanidad. Otros provocaron guerras entre otras naciones. Muchos se dedicaron a matar todo lo que pudieron...

Astaroth abrió nuevamente sus ojos.

---Pero de todos ellos, tengo el presentimiento que tú eres el único diferente, por eso te daré la decisión de elegir, este será mi regalo de cumpleaños para ti.

--- ¿Elegir...? No entiendo.

---Elegir si quieres volver a la rueda de la reencarnación, en donde pasaras por un proceso complejo, o elegir hacer un contrato con mi hermano mayor, así una vez mueras tu alma pasara a ser parte de nosotros.

---...

Leo guardo silencio por unos instantes para procesar la información.

--- ¿Podre ver a madre...?

---Es posible. Pero ya no podrás tener tu vida normal, no podrás ir a la universidad y muchos menos interactuar con los humanos, obviamente que tu madre es una excepción.

[Bueno, ella no cuenta como un humano después de todo, además que volver a la rueda de la reencarnación para luego renacer en otro ser, pero sin recuerdos de nada... suena espeluznante, así que no]

---Haré el contrato.

Leo bajó la cabeza frente a su padre y mostrando todo su respeto dijo.

---Déjame hacer un contrato con el tío, por favor.

Astaroth asintió y la conversación entre ambos continúo un poco más hasta que cada uno se fue a dormir.

Obviamente que por ser un día festivo, hoy, 28 de julio, día de la independencia, no había clases.

***

[ Martes 28 de julio del 2020 --- 09 : 32 am ]

---Ho-hola. Buenos días.

Leo saludó, como siempre; a la mujer sentada, como era de esperar; frente a la pileta de agua.

Como cosa de todos los días, él se sentó a su lado izquierdo después de saludar mientras realizaba un monologo.

--- ¿Cómo estás?

El joven entrelazó su mano derecha con la mano izquierda la chica.

--- ¿Eh...? ¿Qué hoy tengo un aire diferente?

Después de un breve silencio Leo se sonrojó.

--- Así que lo notaste... ¡Bueno, no se puedo evitar! ¡Ha, ha, ha!

Leo miró hacia el rostro de María y dijo con un tono de voz emocionado.

--- ¡Hoy es mi cumpleaños! ¡El día de hoy te alcancé, ahora tenemos la misma edad!

Como que en estos momentos le dieron ganas de aplaudir, pero como solo tenía una mano libre, tan solo le quedó imaginar que muchos aplausos y confetis lo rodeaban.

--- ¿Parezco más feliz de lo normal? Es que hablar contigo todos los días es realmente, como un sueño.

[Después de todo encontré un camino que de verdad quiero seguir. Sentí que toda mi vida no tendría sentido una vez muriera, pero descubrir que la muerte solo sería el comienzo de algo nuevo. Puedo regresar. Puedo estar con madre y con ella. Ahora tengo el tiempo de mi parte. No hay porque apresurarse, puedo estar con María todo el tiempo que quiera. Puedo sálvala. Puedo salvarme] Pensó Leo desde el fondo de su corazón.

Un leve apretón.

---Okey, okey, no te molestes.

Leo trató de calmar a María.

--- ¿Qué no bromee con esas cosas? Hm...

Leo también apretó su mano.

El calor de ella se extendía por todo su cuerpo.

---María, realmente no estoy bromeando, lo digo muy en serio. Después de todo ya te dicho que me gustas y lo siguiera siendo hasta el día que mi corazón deje de latir—

Leo tosió un par de veces.

---Déjame corregir eso... Lo seguirá siendo hasta que yo deje de existir.

El día hoy, fue justo este día, que la reacción de María no solo se abstuvo a un leve apretón de su mano izquierda, sino que sus mejillas se sonrojaron... aunque su expresión seguía siendo como un maniquí que no mostraba ni la más leve sonrisa o mueca.

Pero dejando todo atrás... ella se sonrojó, ciertamente sus mejillas se habían sonrojado minuciosamente, y tan solo por este hecho, todo el rostro de Leo se encendió a un rojo puro.

---Esto... Como lo puedo decir... jajaja.

[¿En serio lo ha entendido...? Vale hasta hoy nunca ha mostrado ninguna reacción es por eso que actué tan valiente... pero saber que me ha entendido me da mucha mas vergüenza...]

---...

[Vamos, no seas cobarde, es el momento, tienes que ir a la ofensiva, tú puedes...]

Leo se dio todos los ánimos que podía, ya que en parte era algo tímido a la hora de expresar sus sentimientos por primera vez, requería algo más que valor.

Lo que necesitaba era se leve empujón.

Ella se sonrojo por sus palabras, tal vez ya se encontraba más cerca de salvarla, si se estancaba aquí, podría convertirse en un error del cual se arrepentiría después.

[¡Aquí voy!]

Fue justo en ese momento, cuando la felicidad en su corazón se encontraba a tope, cuando sus más profundos deseos de su ser se encontraban a su máxima expresión, que algo dentro de ambos se desató.

Como Leonardo fue liberado de las cadenas que representaban su dolor por su trágico destino, ahora podía expresar sus sentimientos libremente, sus emociones rebozaban con una fuerza que el mismo desconocía, el enlace de ambos, hoy es más fuerte que los anteriores días.

Tal seria la fuerza de la luz que irradiaba el alma de Leo que desprendió ligeramente la oscuridad que mantenía cautiva el alma de María.

Leo, con sus sentimientos en su apogeo, apoyando su mano izquierda en donde llevaba la pulsera que representaba en cierta medida algo especial entre ambos; miro fijamente el rostro de María.

Cuando se decidió que decir, para expresar claramente sus sentimientos por ella.

---...

María se movió.

Movió ligeramente su cabeza.

Como si en su interior tuviera una confrontación con la oscuridad que la mantiene cautiva, ella trataba de aferrarse nuevamente a ese brillo de luz que le mostraba una vez más el camino.

Su mirada había dejado, por primera vez; de observar la fuente de agua.

Leo se quedó atónico.

Sus ojos se abrieron ampliamente, como si se fueran a salir de sus cuencas.

Su cuerpo olvidó por un momento el cómo respirar.

Ella giro su cabeza para su lado izquierdo, justo donde él se encontraba.

Sus ojos se miraron los unos a los otros.

De sus ojos dorados ella se reflejaba.

De sus ojos verdes él se reflejaba.

La expresión de Leonardo Astaroth era la de alguien impactada de recibir posiblemente la mejor noticia de su vida,

La expresión de María Torres era su típica expresión gélida, pero algo cambió.

Una sola sonrisa.

Una cálida sonrisa.

Ella sonrió.

Él se quedó estupefacto.

Poco después una lágrima cayó de la mejilla izquierda del Leo.

Y después otra... ni siquiera había transcurrido un minuto y ya el rostro de Leo se encontraba lleno de lágrimas y mocos.

Leo movió ligeramente los labios para decir lo que siempre quiso expresarle.

--- Yo...

Trató de mirarla a los ojos, de donde solo se reflejaba un simple chico de cabello y ojos dorados como el oro, llorando a mas no poder.

---Yo pude proteger esa sonrisa.

***