断られた愛のヘルパーの愛子さんです (スペイン語 の ラノベ)

Capítulo 1: Te ayudaré.

En un mediodía de primavera, en el techo de una preparatoria de Japón.

Se encontraba una chica con el pelo azul oscuro como la noche más luminosa con coletas a los costados y un chico con un pelo azul como el sol más radiante.

Estaban frente a frente, la chica lo miraba determinada y con un claro sonrojo, mientras que el chico tenía mucha intriga.

???: ¡Fukanō Akarui! Me gustaría...

Pero ¿Qué hizo que estuviera en esta situación?

Regresemos tiempo atrás, donde este día había empezado.

La joven chica estaba durmiendo hasta que es despertada por una alarma programada en su teléfono.

Ella inmediatamente toma su teléfono y lo pone enfrente de ella para apagar la alarma y a su vez fijarse en la hora.

Era temprano, pero no podía relajarse mucho, debido a que debía ir a la preparatoria.

Esta chica es: Aiko Itami, una joven de 17 años que está en el último año de preparatoria.

Ella se levanta de su cama para empezar a arreglarse.

Su habitación es lo que muchos describirían como la de una aficionada a los videojuegos pero sobre todo al mundo del Cosplay.

En lo que ella aún estaba arreglándose, había algo en su mente que estaba pensando con ciertas dudas.

Aiko: (¿Podré hacerlo?)

Su cara mostraba claramente inquietud ante esa pregunta que se hacía a sí misma.

Tras arreglarse lo mejor posible, ella sale de su habitación para ir directamente al comedor.

Ella vive en un apartamento, por lo cual la distancia entre su habitación y el comedor es corta.

En esa zona en particular, se encuentra con una mujer de pelo muy largo y liso con el mismo color tanto pelo como ojos.

Dicha mujer es su madre: Yoruko Itami.

Ella estaba tranquila sirviendo en la mesa dos platos con un desayuno ligero, hasta que vio a su hija para recibirla con una sonrisa.

Yoruko: Buenos días hija.

Aiko: Buenos días mamá.

Aiko expresaba una sonrisa también al ver a su madre, por lo que posteriormente se sentó en su puesto habitual en la mesa del comedor.

Al tomar ambas sus asientos, agradecen por la comida como todos los días.

El ambiente era de absoluta calma, lo que da un indicio que la relación madre e hija es bastante buena.

Aiko mientras comía seguía pensando en aquella pregunta, por lo que en un momento detuvo su ritmo al que estaba comiendo.

Esto al ser notado claramente por su madre llama su atención, por lo que le genera intriga.

Yoruko: Hija ¿Está todo bien?

Aiko le sorprendió lo rápido que se percató su madre, pero también con cierta brevedad volvió a estar calmada y con una sonrisa.

Aiko: Si, es que estaba preocupada por algo de la preparatoria.

Ella colocó una mano por detrás de su nuca mientras estaba algo apenada.

Aiko: Ya sabes que a veces se me dificultan algunas materias.

Yoruko tiene una ligera risa antes de responderle a su hija.

Yoruko: Jeje, claro que lo se, pero también se que tienes a un lindo chico que está ayudándote en esas situaciones.

Aiko se sonrojo claramente al oír eso, por lo intenta desviar la mirada y por ende evitar hablar del tema.

Su madre nota que ahora el tema no prosiguió al mencionar aquel chico, por lo que se limitó a darle un pequeña sonrisa traviesa y juguetona a su hija, debido que para ella es claro que está enamorada de él, algo que ella está feliz de ver en ella.

Tras eso, Aiko terminó de comer, fregó su plato y tomó su bolso que tenía en su habitación para acercarse a la entrada de su apartamento.

Ella mira hacia atrás para alzar un poco la voz y ser escuchada por su madre tras haberse colocado sus zapatos que tenía guardados en un mueble particular donde se suelen guardar en la entrada.

Aiko: ¡Ya me voooy!

Yoruko tranquilamente responde ante tal gesto desde el comedor.

Yoruko: ¡Cuídate hija! ¡Buena suerte!

Aiko tras ser correspondida en su gesto por su madre, se va tranquila y feliz.

Mientras ella empieza su camino a su preparatoria, su madre estaba feliz pensando algo en particular.

Yoruko: (Han pasado muchos años desde que se conocen, vivieron varias experiencias y más con la afición de mi hija de hacer cosplays).

Yoruko: (Creo que ella está pensando seriamente en declararse)

La expresión en la cara de Yoruko es absoluta felicidad y confianza en que su hija va a lograr ser correspondida por la persona que ama.

Aiko estaba caminando tranquilamente aunque algo sonrojada, ya que ella también estaba pensando en el tema como su madre, pero a diferencia de ella... No posee la misma confianza.

Aiko: (¿Realmente podré hacerlo?)

Su expresión cambió a una dónde claramente tiene dudas respecto al tema.

Aiko: (Él siempre fue muy gentil conmigo, nos hemos divertido mucho con mis aficiones, pasamos grandes momentos en los diferentes niveles académicos, pero aún así... ¿Por qué tengo dudas? ¿Por qué no puedo confiar en que seré correspondida?)

En ese momento una imagen del chico se proyecta en su mente, su pelo amarillo como el sol, sus ojos de diferentes colores y una encantadora sonrisa, es lo que destacaba de el.

Aiko no podía dejar de pensar en buscar la razón de sus dudas.

Hasta que es interrumpida por alguien más.

???: ¡Aiko!

En este momento y sin previo aviso, Aiko es abrazada por la espalda por una chica de un lindo pelo largo rosa que resalta a la vista de cualquiera, además de unos brillantes ojos morados y unas gafas de lectura que los hacen destacar más.

Aiko se asusta ya que no noto su llegada hasta que fue abrazada.

Aiko: ¡Utsukushī!

Ella es: Nyūsatsu Utsukushī, una chica que conoció Aiko en su primer año de preparatoria.

Nyūsatsu: Utsukushī no, recuerda Nyuu, Nyuu.

Nyūsatsu con una expresión de puchero en su cara le toca las mejillas de Aiko son sus dedos.

Aiko: Mmm, de acuerdo, de acuerdo, lo siento Nyuu.

Nyūsatsu sonríe y deja de molestar con eso a Aiko.

Nyūsatsu: Bien, vayamos a la preparatoria.

Aiko: Jeje, de acuerdo.

Las 2 caminaron juntas el resto del camino, su platica se limito a lo mas habitual, sobre las clases de hoy sumado a como les había ido con alguna tarea.

Al llegar a la entrada de la preparatoria, ellas notan a 2 chicos en la entrada hablando entre sí.

Uno de esos chicos es aquel con el que Aiko estuvo pensando desde que despertó: Fukanō Akarui, su amiga de la infancia, el cual de cariño ella lo apoda Fuka.

Por otra parte, está el otro chico: Asahi Maruyama, un chico nuevo de pelo largo y gris oscuro con ojos rojos, que llegó hace unos días a la clase de Nyūsatsu, Fukanō y Aiko.

Aiko: (Oh, ahí está Fuka, será mejor que lo salude, además está con Maruyama, posiblemente está haciendo un nuevo amigo).

Sin embargo, antes de que las 2 pudieran dar a notar su presencia, empiezan a escuchar de lo que hablan.

Asahi: Entonces ¿Itami y tú no están saliendo? Disculpa por mal interpretarlos, se ven tan unidos.

Fukanō: Así es, no te preocupes.

Aiko estaba confundida de saber que ella era el tema de conversación, pero Nyūsatsu y le hace un gesto de guardar silencio, para proceder a colocarse en un lugar donde puedan escuchar con cautela.

Asahi: Ya veo, aunque también escuche que algunos compañeros de que tarde o temprano ustedes serán pareja.

Aiko se sonroja al siquiera pensarlo e imaginar algo así, solo que lo disimula un poco para no ser notada por Nyūsatsu.

Fukanō: No importa lo que digan, nunca va a pasar.

De la nada los ojos de Aiko se abren de par en par y retumba en su cabeza esa última frase "nunca va a pasar".

Asahi: Wow... ¿Por qué?

Fukanō: No la veo con esos ojos, es una gran amiga, eso no lo puedo negar, pero... No la veo como una futura pareja.

Asahi: Eso quiere decir...

Fukanō: Que posiblemente la rechace si ella se me confesara, lo cual dudo mucho que pase, pues si.

Asahi: ¿Crees que ella te ve igual que tú a ella?

Fukanō: Por supuesto, no tengo razones para pensar lo contrario.

Asahi se sentía apenado, debido a que en poco tiempo que ha estado en la preparatoria, él si noto que Aiko le interesa Fukanō, por lo cual, sentía que estaba viendo la punta del iceberg de una triste historia de amor.

Sin embargo, Fukanō no entiende su reacción, por lo que con una sonrisa intenta animarlo.

Fukanō: Hey, no te preocupes por mi, se que no parezco el chico más listo o el que más se relaciona con chicas, pero veras que conseguiré a la indicada.

Asahi: (Si no es por ti por quien siento pena...) Bien, vayamos al salón, las clases comenzarán pronto.

Asahi tranquilo se va hacia el salón sin esperar respuesta.

Fukanō estaba extrañado viendo a todos lados al recordar algo en ese momento.

Fukanō: ¿Será que Aiko y Nyūsatsu llegarán tarde?

Nyūsatsu le acaricia el pelo a Aiko mientras esta aun no podía creer lo que escucho, pero hay un problema.

Nyūsatsu: Bueno, es normal que estés así, muchas chicas apreciarían tener un gran amigo como Fukanō que no las vean con otras intenciones.

Aiko la veía con una mirada de incredulidad ante lo que dijo, pero Nyūsatsu tenía una sonrisa y ojos cerrados en ese momento.

Aiko: (Me acaban de rechazar indirectamente y tú dices eso...)

Aiko: (No... Ella no lo sabe, nunca se lo dije a nadie)

Aiko: (Ni siquiera... A él.)

Aiko mantiene la compostura ante tal momento y le da una respuesta positiva a Nyūsatsu.

Aiko: Si, tienes razón.

Las 2 se acercaron a Fukanō que se mantuvo en la entrada.

Aiko: Fuka.

Nyūsatsu: Buenos días Fukanō.

Fukanō estaba feliz de verlas.

Fukanō: Hey chicas ¿Dónde se metieron?

Aiko sonríe tranquila al verle esa expresión.

Aiko: Pues, solo nos tomamos el tiempo para hablar cosas de chicas ¿No es así Nyuu?

Nyūsatsu asiente con su cabeza para ser cómplice de la excusa de Aiko.

Fukanō: Perfecto.

Fukanō nuevamente reacciona al recordar algo.

Fukanō: Oye, Nyuu ¿Podrías adelantarte? Necesito hablar con Aiko.

Nyūsatsu con una linda sonrisa le responde.

Nyūsatsu: Por supuesto, nos vemos en clase.

Ella se va con calma y Aiko le asiente a su vez que despide con la mano.

Sin embargo, una vez ella se aleja Aiko está confundida y mira con intriga a Fukanō.

Aiko: ¿Qué ocurre?

Fukanō se pone nervioso e incluso sonrojado.

Fukanō: Después de clases, me gustaría hablar de algo contigo en el tejado de la preparatoria en la hora del almuerzo.

Aiko estaba sorprendida, no podía creer lo que escuchaba y veía al haber presenciado la conversación de Fukanō con Asahi.

Eso le dio una gran felicidad, pero rápidamente convirtió su cara en una sonrisa calmada para responder.

Aiko: Claro, ahí estaré.

Fukanō sonríe al oír su respuesta.

Fukanō: Gracias, nos veremos ahí.

Aiko: Si.

Y así ellos fueron juntos a su respectivo salón, donde tendrían clases sin nada a destacar.

Exceptuando por el detalle que Aiko estaría pensando innumerables escenarios de lo que podría pasar en el tejado, pero dado a la imagen de Fukanō apenado y sonrojado, esos pensamientos eran cegados totalmente a resultados positivos.

Así, pasaron las horas y el momento de encontrarse llegó.

Para la sorpresa de Aiko cuando subió al tejado, Fukanō ya estaba allí, ya que ella no se dio cuenta de que él salió primero del salón.

Fukanō al verla le da una linda sonrisa.

Fukanō: Si viniste.

Aiko se acerca algo apenada y sonrojada.

Aiko: Y... ¿Qué es eso tan importante que debes decirme?

Fukanō empieza a ver el cielo dando una imagen para la vista de Aiko.

Fukanō: Verás, me he dado cuenta de algo muy valioso y quería decírtelo.

Aiko estaba muy expectante ante lo que él podría decirle.

Fukanō le mira muy sonrojado.

Fukanō: Estoy enamorado.

El corazón de Aiko se acelera, su cara está más roja y sin dudas ella estaba muy feliz de oír eso.

Aiko: ¿¡Así!? ¡Qué genial!

Fukanō: Sabía que estarías feliz por mi.

Aiko en ese momento sintió un golpe en el corazón tras oírlo, estaba confundida.

Aiko: (¿Qué estaría feliz por él?...)

Fukanō: Verás, la razón por la que le dije a Nyuu que se adelantara, es porque quiero que seas tu la primera que lo sepa.

Fukanō: Estoy enamorado de ella.

Aiko sentía como si un francotirador le diera un disparo certero en su corazón, ella no podía creer lo que acababa de escuchar.

Aiko: (¿Qué?...)

Fukanō: Solo que... No se si ella gusta de mí... Tampoco se como decírselo o siquiera que decirle.

Fukanō: Tengo miedo...

Aiko al oír esas palabras su sorpresa por lo que él dijo, se convirtió en una empatía inmediata.

Aiko: (¿Miedo?... Claro... Miedo).

Aiko: (Es lo que más sentía al pensar en lo que pasaría si me confesara a él...)

Aiko miró a la cara de Fukanō, la cual ahora era de preocupación y él estaba viendo el suelo, lo cual le daba un golpe más a su corazón pero a su vez a su conciencia.

Aiko: (Yo te amo, estoy enamorada de ti, me gustaría poder decírtelo...)

Aiko: (Pero es claro por tu cara que realmente la amas... ¿Qué podría hacer en esta situación?)

Aiko: (No me trajo aquí solo para decírmelo, el... Él me está pidiendo ayuda).

Aiko: (¿Ayuda?... Claro, esa es la respuesta).

Aiko: (Si realmente lo amo, debo ayudarle a conquistarla, a que él sea feliz...)

Aiko tomó un suspiro y su mirada era determinación pero a su vez estaba sonrojada.

Aiko: (¡Lo haré!) ¡Fukanō Akarui!

Fukanō al oír que Aiko le llama por su nombre le sorprende pero sobre todo le intriga.

Aiko: ¡Me gustaría!...

Aiko: ¡Ser tu ayudante personal para que puedas conquistar a Nyuu!

En ese momento, la puerta de una historia que nace desde un rechazo indirecto, ha sido abierta.