Zorro Negro

第2話 Escape complicado

Al entrar el encapuchado a un cuarto para esconderse, se da cuenta que en el habían 5 reptiles y una joven humana.

Encapuchado: aaaa, creo que me equivoque de habitación, lo siento así que nos vemos, jeje.

Señorita: ¡ayumúdameeee!

Reptil 1: no saldrás de aquí querido amigo, muchachos, vallan por él.

Reptiles: ¡vamos!

Encapuchado: ya dije que lo sentía chicos, no quiero tener problemas.

Reptil 1: ya es tarde para eso.

Cuando el encapuchado trata de huir por la puerta se encuentra con otros 2 reptiles que pasaban por el pasillo, al verse acorralado decide volver a la habitación, al estar dentro se saca la capa con un movimiento rápido con lo cual misteriosamente se apagan todos los faroles que había en la habitación, los otros dos reptiles entran por la puerta he inmediatamente una sombra negra sale rápido y los deja encerrados, al prender una antorcha estos se dan cuenta que sus camaradas estaban inconscientes, los despiertan rápidamente y van en busca del intruso que había escapado.

Reptil 1: aaaagg, que fue lo que paso.

Reptil 6: eso mismo nos preguntamos.

Reptil 1: ese maldito de la capa donde se metió.

Reptil 7: no se encontraba aquí pero algo nos encerró en este cuarto.

Reptil 1: malditooo, vamos a por el muchachos, avísenle al jefe que iremos a cazar basuras, tu mujer nos espe- aaa ¿dónde está la muchacha?

Reptil 6: ¿a? Cual muchacha.

Reptil 1: ¡maldito encapuchado!

En ese momento el reptiles se transforma en un gran lagarto y destruye la puerta de la habitación, tras salir de la guarida comienza a seguir la fragancia de la señorita para encontrarlos y emprende la cacería.

Por otro lado el misterioso encapuchado se dirige hacia los barrios bajos con la joven en su espalda cubierta con la capucha, la muchacha que comienza a recobrar al sentido se da cuenta que el joven que la lleva tiene unas orejas peludas y negras y una gran cola negra con la punta blanca.

Señorita: ¿q-quién eres?

Encapuchado: ¿he? Aaa, recobraste la conciencia.

Señorita: ¿que eres? ¿Tú me salvaste?

Encapuchado: ooo pues se podría decir que te salve, pero sólo por ahora, y además soy un zorro, ¿tuuuu? Por lo que veo eres una humana.

Señorita: a, si soy humana, pero a todo esto tu ¿eres un zorro?, Nunca había visto un zorro negro.

Encapuchado: pues soy un zorro especial, el único zorro negro.

Señorita: ¿en serio?

Encapuchado: si, el único, cambiando de tema, ¿qué hacías en ese lugar?

Señorita: pues, (su cara cambia a un estado de depresión) me habían capturado, resulta que mi hermano me vendió y traicio-

Encapuchado: a bueno, no es mi problema así que me involucrare puesto que no es mi problema, es sólo un problema de tu familia.

Señorita: ¿qué? ¿Cómo que no te involucraras? ¿No eres un hombre?, entonces ayúdame a volver con mi familia para poder contarles que todo está bien.

Encapuchado: no no, no es mi responsabilidad y además soy un mercenario y no un voluntario de beneficencia.

Señorita: te pagaré la suma que quieras, yo soy la hija de la de una famosa familia de estos lugares, so-

Encapuchado: y a mí no me interesa, como me dijiste tu propia familia te traicionó, como puedo esperar una recompensa, en vez de eso querrán matarme y a ti también.

Señorita: espera, el que me traicionó fue mi hermano pero mi padre se alegrará de verme, después de todo soy su hija favorita.

Encapuchado: eee, así que puede que realmente consiga un buen pago por todo esto, pero primero debemos conseguirte algo de ropa y salir de esta ciudad, vamos donde un viejo conocido.

Señorita: gracias, estoy segura que serás bien recompensado cuando mi padre se entere que estoy viva.

Encapuchado: pues está bien, andando.

Al ir entrando en los barrios bajos de la ciudad se da cuenta que ya han rodeado el lugar por lo que deciden tomar un camino secreto que tiene preparado para estas ocasiones. Cuando logra llegar a la tienda del Mercader se a cuenta que hay luz dentro del lugar y se escucha mucho ruido por lo que decide entrar por a ver qué sucede, y en cuanto entra se da cuenta que se encontraban 3 reptiles y en un escritorio estaba recostado el Mercader.

Encapuchado: viejo, ¿estás bien? ¡Viejo!

Reptil A: ¿a? Eres tu mocoso, ahora acabaremos con ti-

Encapuchado: ustedes, que le ha hecho al viejo. (Diciéndolo con una expresión de odio) Los mataré !malditos¡

Voz misteriosa: haaazlooo... maaataanoooos.

Señorita: ¿he? Que fue eso.

Reptil A: ¡ja! Esta vez nosotros te la haremos pagar maldito mocoso.

Reptil B: no nos humillaras 2 veces maldito.

Encapuchado: todo terminó.

Con un movimiento rápido se saca la capucha y los reptiles logran ver lo que es en realidad.

Reptil C: e-el zorro n-negro.

Reptil A: no puede ser.

Reptil B: ¡maldición!

En cosa de un instante aparece a las espaldas de los reptiles he inmediatamente los 3 sujetos caen al suelo con las gargantas degolladas, la señorita en el instante queda horrorizada y a la vez paralizada por lo ocurrido, sin saber cómo sucedió todo. En encapuchado se acerca al Mercader sólo para darse cuenta que ellos lo habían asesinado de una puñalada en el pecho.

Al dejarlo en su cama cubierto con una sábana decide irse del lugar pero no sin antes tomar el medallón que le había vendido anteriormente al encontrarlo en la mesa.

Encapuchado: lamento haber llegado tarde viejo y más aún haberte involucrado en esto, me llevare esto porque así lo hubieras querido, bueno, realmente nunca me lo hubieras entregado pero será un pequeño recuerdo de nuestros negocios, hasta pronto viejo. (Con una pequeña sonrisa de amargura)

Bueno, ahora vamos andando.

Señorita: ¿q-que es lo que acaba de suceder?

Encapuchado: nada que importe mucho, ahora debemos irnos, ¿no quieres ver luego a tu padre?

Señorita: heee...

Encapuchado: bueno vamos de una vez.

Señorita: ... ha.

Al ver que la joven aún seguía paralizada por el miedo el zorro decide llevarla en el hombro para poder irse luego del lugar.

Tras ir recorriendo las calles y evitando a los reptiles el encapuchado decide entrar a una tienda de ropa de dónde saca unos vestidos de mujer y se los lleva en su bolsa para luego seguir caminando hacia la salida de la ciudad. Cuando están por llegar a la salida se percata que un grupo de 10 reptiles esperaban en la entrada y uno de ellos estaba en su forma de lagarto gigante, al ver la salida bloqueada decide intentar por otro lugar pero al dar la vuelta se da cuenta que ya estaba rodeado por un grupo de al menos 23 lagartos, con esto a sus espaldas decide irse por el camino de menor resistencia y pasar por la salida donde se encuentran sólo 10 de ellos.

Encapuchado: oye, reacciona, no me seas un estorbo en este momento chiquilla.

Señorita: ...

Encapuchado: maldición, aún está en shock.

Reptil 1: maldito mocoso, al fin llegas, no sabes cuánto te estuve esperando, ahora este es tu fin desgraciado.

Encapuchado: no tengo tiempo de jugar con ustedes basuras.

Reptil 1: a quien llamas basura maldito, te mataré ahora mismo y luego seguiré jugando con esa muchacha.

Señorita: hee, ¡noooo!

Encapuchado: tsh, no me grites al oído idiota.

Reptil 1: ¡muereeeee!

Voz misteriosa: aaacabaa coon toodooos. Jejejejeje.

Señorita: ¿he? Esa voz...

Encapuchado: ¡cállate malditooo!

Reptil 1: ¡no seas insolente mocosooo!

La lucha ya había comenzado y el encapuchado tenía una clara desventaja en número, por llevar a la joven señorita y por la forma bestia completa de su rival. El lagarto comenzó a lanzar unos fuertes golpes que destruirán el suelo de las calles pero aun así no atinaban contra el encapuchado, este por su parte sólo trataba de pasar hacia la salida de la ciudad pero se veía algo complicado por los fuertes golpes del lagarto, tras varios golpes fallidos el reptil ve su oportunidad al notar un pequeño tropiezo del encapuchado con una roca de los escombros, al lograr darle un golpe le logra sacar la capa y moverlo unos metros hacia atrás, pero para su sorpresa se da cuenta de con quien está tratando, el zorro negro una leyenda entre las ciudades que cuenta sobre los curiosos asaltos con los que está relacionado.

Reptil 1: i-imposible, el zorro negro, n-no creas que tengo miedo, sólo eres un simple ladrón, no podrás ganarme con tus pobres habilidades.

Encapuchado: haa, ¿tú crees? Pues comprobemos quien le gana a quien, ahora comienza la diversión.

Reptil 1: ¡no me subestimes maldito!

Después de esa pequeña charla retoman el combate, el reptil comienza tirando grandes zarpazos que prácticamente cortaban al mismo viento, aun así no lograba atinar algún golpe contra el zorro, luego el lagarto alza las manos para preparar un gran ataque, en ese momento el zorro negro ataca rápidamente pero realmente cae en la trampa del lagarto, este al ver que se acerca lanza un gran aliento que inunda el ambiente, lo cual hace que se duerman todos lo que estaban en el lugar, excepto el joven zorro que aún se mantiene a duras penas consciente, al ver la oportunidad de atacar, el lagarto se va acercando lentamente hacia el zorro.

Reptil 1: je, ahora no puedes hacer nada mocoso.

Encapuchado: aggg.

Reptil 1: jajaja, que se siente ser la presa ahora maldito, disfrutaré rompiéndote cada hueso de tu cuerpo.

Encapuchado: no... te... dejaré hacerlo pedazo de basura.

Reptil 1: humm, ¿aun crees que tienes alguna oportunidad de salir vivo de esta? Si ya es un milagro que sigas despierto.

Encapuchado: te... derrotare imbécil.

Reptil 1: basta de charlas, ya es la hora de que mueras miserable, se acab-

Voz misteriosa: muere basura.

Encapuchado: ¡maldito viejo! ¡Sólo por esta vez usaré tu fuerza!

Reptil 1: ¿que fue eso? No me digas que eres seguidor del culto oscuro ¡maldito mocoso!

Encapuchado: !no me compares con esos inútiles bastardo¡

En ese momento un aura oscura salía del cuerpo del zorro negro y después de eso desapareció entre las sombras, el reptil toma inmediatamente posición defensiva, pero de igual manera comienza a recibir cortes por todo su cuerpo, primero sus brazos quedan inútiles al haber cortado los tendones y ligamentos de los músculos, después sus pies, así quedando de rodillas en el suelo y frente a él un zorro negro con un gran aura de pura oscuridad, este era el fin del lagarto, lo veía en los ojos de odio en frente suyo, y en un parpadeo su garganta es degollada y al fin cae muerto el gran reptil.

Tras terminar la batalla el zorro negro toma a la joven y sale con ella de la ciudad.

Por otra parte, entre lo más oscuro de la ciudad llega el informe que el grupo que cazaba al encapuchado fue derrotado y el gran reptil y tres lagartos más fueron encontrados muertos de una forma similar, tras enterarse de eso el líder de los reptiles decide comenzar una cacería Real contra el encapuchado misterioso debido a que el gran reptil era su hermano menor, por lo cual el odio en su cara es más que evidente.

Al amanecer y en un bosque a las afueras de la ciudad, la joven por fin despierta y ve a su lado al encapuchado junto a ella, su actitud es algo relajada debido a que no recuerda muy bien lo que sucedió ayer pero ahora tiene una expresión de tristeza en su rostro.

Al notar que esta despierta la joven, el encapuchado le pasa los trajes que robó anoche y se los entrega.

Encapuchado: hey, ten.

Señorita: he, ¿qué es esto?

Encapuchado: unos vestidos que me conseguí, vamos, Ponte alguno luego.

Señorita: heee, muchas gracias... pero, podrías ir a otro lado mientras me pruebo los vestidos, por favor.

Encapuchado: aa, ¡ha! Por supuesto, ahora iré a buscar algo para que comamos.

Tras unos minutos el encapuchado regresa con un conejo y unos peces que había capturado, al verla queda impresionado por la ropa que tenía ahora la señorita, era un vestido de color rojo que llegaba hasta antes de las rodillas y arriba estaba decorado con una rosa en el hombro izquierdo.

Señorita: no te me quedes mirando así y di algo. (Con una expresión un poco molesta)

Encapuchado: aaa, pues, te queda bien, supongo.

Señorita: como que supongo, ooo, que poco sensible eres.

Encapuchado: de todos modos no es tiempo de preocuparse de la ropa, Por ahora comamos algo y vamos hacia tu casa.

Señorita: está bien, a todo esto, déjame presentarme, soy Lizbet Crownbell, hija del Conde Crownbell

Encapuchado: ¿he? ¿De verdad? Del Conde Crownbell ¿dueño de todo este país?

Lizbet: del mismo.

Encapuchado: valla sorpresa que me has dado, que buena recompensa obtendré Al llevarte con el Conde.

Lizbet: ya te lo dije ¿no? Soy muy importante para él. Bien, ahora que me he presentado es tu turno.

Encapuchado: ¿he? Eee, pues no me queda de otra, mi nombre es Elzok, sólo Elzok.

Lizbet: ¿Elzok? ¡Zoki! Me gusta más.

Elzok: ¡no le cambies el nombre a las personas!

Lizbet: pero... es que así suena más lindo. (Diciéndolo con una cara tierna)

Elzok: aun así mi nombre es Elzok.

Lizbet: déjame decirte Zoki solo mientras este contigo.

Elzok: tsh, está bien. Sólo muestras estemos juntos, ya luego te dejaré con tu padre y me iré con la recompensa. Bueno entonces, vamos andando.

Lizbet: está bien, no queda muy lejos la mansión de nuestra familia.

Elzok: el gran problema es como llegaremos sin ser detectados por tu hermano o los lagartos esos.

Lizbet: pues eso te lo dejó a ti, tú me cuidaras durante el viaje.

Elzok: eem, bueno, es mi trabajo así que no te preocupes.

Después de haber desayunado se prepararon y emprendieron rumbo hacia la mansión de los Crownbell.